Toneladas de piedras y tierra cayeron sobre la carretera, tras un fuerte aguacero. Centenares de vehículos de carga y pasajeros están represados.
Los habitantes de Ocaña amanecieron con dos vías obstaculizadas.
El segundo hecho lo constituye el cierre de la vía en el sitio denominado la Estancia, que comunica a Cúcuta con Ábrego, donde conductores informales protestan por los operativos adelantados por la Policía de Carreteras.
En el alto de Sanín Villa a eso de la 1:30 de la mañana se registró un derrumbe de grandes proporciones que taponó en su totalidad la calzada vial.
De inmediato, los miembros de las microempresas encargadas de la limpieza de la carretera se trasladaron al sitio e informaron a los ingenieros la necesidad de trasladar maquinaria pesada para conjurar la emergencia.
“Son más de 15 mil metros cúbicos que borró literalmente doscientos metros de la calzada y debido a la inestabilidad de los taludes, es difícil maniobrar”, precisó el director de la territorial de Invías Ocaña, ingeniero Wilson Jaime Barbosa.
Señaló que se ha dispuesto de todo el recurso técnico y humano para atender esa emergencia con cargadores, retroexcavadoras y volquetas para despuntar el derrumbe y lograr evacuar las grandes rocas. Incluso se ha pensado en la utilización de dinamita.
El funcionario garantiza sólo el paso de automotores hasta mañana después del mediodía, si los factores climáticos lo permiten. “No es viable pasar por encima del derrumbe, ya que sería fatal”, advirtió a los conductores que aún permanecen a la vera de la carretera.
Solicitó a los representantes de las empresas transportadoras no despachar vehículos hasta cuando se entregue la orden, por razones de seguridad.
De acuerdo con el análisis de los expertos la inestabilidad de taludes tiene un radio aproximado a los 300 metros de la zona en donde se encuentra el derrumbe y se puede desprender algunas rocas de gran tamaño y ocasionar tragedias.
Jaime Barbosa decretó la alerta roja en aras de brindar seguridad a los viajeros para que se regresen a las ciudades más cercanas. Esta vía es muy importante para el intercambio comercial de Ocaña con el interior del país y la costa norte colombiana.
Se debe evitar al máximo utilizar la carretera en las horas de la noche o acercarse a la maquinaria. Si tienen afán podrá tomar la vía alterna Río de Oro, El Carmen, La Mata para luego tomar la troncal del Caribe, explicó el funcionario.
Tampoco se permite pasar por encima del derrumbe porque se corre el riesgo de quedar atrapado en la mitad. “Nunca había caído un derrumbe de esa magnitud. Sólo hace quince años se presentó una situación apremiante, pero no como la de ahora”, exclamó.
En esta ocasión, debido a las condiciones del terreno es imposible hacer trasbordos como alternativa para conjurar el bloqueo definitivo. “Fue un desprendimiento inesperado y se debe habilitar paso de lado y lado”, dijo el ingeniero.
Ante este tipo de bloqueo de las carreteras por distintas circunstancias es donde la gente se lamenta el retiro de la aerolínea Satena por la falta de apoyo de las distintas comunidades.
Bloqueo de transportadores en Ábrego
Ante el endurecimiento de las medidas aplicadas durante los controles de Tránsito por parte de la Policía de Carreteras, los conductores informales decidieron bloquear la carretera que conduce hacia la capital del departamento en el sitio conocido como la Estancia.
De inmediato, el Comandante del Segundo Distrito de la Policía de Ocaña, mayor Jairo Alonso Gómez Correa, ordenó el traslado de sus hombres para brindar protección a la personera, Yenny Paola Torrado para apaciguar los ánimos.
“Es un bloqueo absurdo de los transportadores informales, antes de actuar deberán exponer a las autoridades el inconformismo para evitar ese tipo de traumatismos”, reiteró el oficial.
Los representantes de los transportadores se reunieron con las autoridades y decidieron desbloquear la vía para permitir el paso de automotores.
El Alcalde de Ábrego, Wilmar Arévalo Sánchez, manifestó que es una situación social y económica muy difícil porque se encuentran al margen de los parámetros y la norma a nivel nacional obliga a la policía de carreteras hacer ese tipo controles.
Afirmó que se debe acudir al diálogo para evitar ese tipo de taponamiento de la vía, porque genera grandes pérdidas en el municipio.
El comandante de la Policía, mayor Gómez Correa, dejó en manos de la comisión especializada para que escuche la petición respetuosa de los conductores, expongan sus inquietudes y sin caer en la violación de las disposiciones legales vigentes buscar una salida viable a esa problemática social.
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