En análisis de vertimientos.
Más de 180 muestras de aguas residuales en 35 puntos de muestreo a municipios y empresas del Cesar, demostraron que los vertimientos hechos a varios ríos y corrientes de agua del departamento no tienen las condiciones ideales.
La identificación de los niveles de contaminación provocada por 16 municipios y 19 empresas como Emdupar, Empresa de Servicios públicos de la Paz EMPAZ, OLEOFLORES, Palmas de Casacará, Sistemas de Aguas Residuales de la Jagua, Astrea, Aguachica, AGROINCE, INDUPALMA entre otras, dejaron ver un incumplimiento en los permisos de vertimientos otorgados por Corpocesar.
El proceso de caracterización de las aguas residuales a empresas y municipios del departamento, fue posible gracias a un convenio realizado entre Corpocesar y la Universidad del Magdalena que durante un año trabajaron en el seguimiento ambiental de los permisos de vertimientos y planes de manejo de entidades públicas y privadas.
El seguimiento no sólo a los generadores de vertimientos sino a los cuerpos de agua utilizados por ellos como receptores a los cuales se les hicieron caracterizaciones para determinar su calidad, demostraron que las industrias de palma del departamento como Palmagro, Palmacará, Oleoflores y Agroince no cumplen con los porcentajes de remoción establecidos por lo que el agua que es utilizada para riego debe ser empleada con restricciones para tal fin, ya que puede contaminar las fuetes de agua subterránea o generar problemas igualmente de contaminación a nivel de suelos.
La investigación concluyó igualmente que las aguas residuales del departamento del Cesar no cumplen con los porcentajes de remoción establecidos por la Ley colombiana, generando altos niveles de contaminación a las corrientes de agua a los que son vertidos.
Sobre lo anterior, el informe pone en conocimiento que los puntos más afectados en el Cesar por vertimientos de aguas residuales son el Caño Cristo, El caño el Pital en el Municipio de Aguachica donde los vertimientos se realizan de forma directa, la ciénaga de la Pachita, el punto de descarga sobre el caño San Ignacio en el municipio de Curumaní, el caño Carolina en el municipio de Pueblo Bello, y los ríos Cesar y Guatapurí por los vertimientos del Tarullal y Salguero.
“Con los resultados de esta investigación vemos la necesidad de realizar campañas de concientización, ampliar nuestro programa de manejo de cuencas y recomendar a las administraciones y municipales y al Departamento, la importancia de impulsar programas de mejoramiento y adecuaciones de las estructuras de tratamiento de aguas residuales con el fin de mitigar el impacto que actualmente se está causando sobre los ríos y quebradas” afirmó Virgilio Calderón Peña director general de Corpocesar.
Agregó además que: “Este proyecto nos permite como autoridad ambiental, no sólo aumentar nuestra capacidad de gestión, sino contribuir a través de los resultados obtenidos en esta investigación, seguir luchando contra la contaminación y el deterioro del medio ambiente convirtiéndolo en un objetivo prioritario de los sectores públicos y privados, y en una estrategia para la búsqueda del crecimiento económico en equilibrio con la protección del medio ambiente por eso queremos enfatizar en la importancia de impulsar programas de concientización en los municipios y en las empresas del Cesar sobre el manejo adecuado de plantas de tratamiento, lagunas de estabilización que funciones adecuadamente confirmando esto a través del seguimiento ambiental.” afirmó el Director General de Corpocesar.
DATOS DEL PROYECTO
El proyecto hizo parte del Fortalecimiento del Control Ambiental a través de los Procesos Misionales de CORPOCESAR en su jurisdicción, permitiendo que se hiciera un estricto seguimiento a los permisos otorgados por Corpocesar a las empresas del departamento que producen agentes contaminantes que son vertidos a los cuerpos de agua escogidos por la corporación como receptores de vertimientos líquidos.
“Gracias al estricto seguimiento que se realizó a las empresas y los municipios del departamento que cuentan con permisos otorgados por Corpocesar, se pudieron determinar los valores de los principales parámetros que describen la calidad de las fuentes de agua y de los vertimientos que están siendo arrojados a ellas, para establecer no sólo el estado de estos cuerpos de agua y tomar medidas para evitar en ellos la contaminación, sino para medir el grado de cumplimiento de las obligaciones impuestas a los usuarios de los cuerpos receptores de vertimientos por lo que con la información se tomarán nuevas medidas para mejorar la situación ambiental.
El proyecto desarrollado entre Corpocesar y la Universidad del Magdalena tuvo un costo de 291 millones de pesos, dentro de este también se recopilaran datos importantes sobre las cuencas, se identificaron los principales puntos críticos como tributarios, obras hidráulicas existentes, taponamientos, y toda tipo de intervenciones que generan alteración de la dinámica hidráulica de las cuencas y que por ende agudizan el problema generado por los vertimientos de residuos líquidos en los cuerpos de agua del departamento que han sido escogidos para la realización de este importante proyecto investigativo y de seguimiento ambiental.
Además se hizo una descripción biótica de las cuencas escogidas con énfasis en las zonas de vertimientos, incluyendo aspectos como flora y fauna terrestres y acuáticas, y se Implementó como parte del proyecto un laboratorio especializado para el análisis de agentes contaminantes en los cuerpos de agua en el Cesar.
María Lourdes Zimmermann Cuello
Jefe de Prensa
CORPOCESAR
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